Una de las claves para comprar un sofá es tener en cuenta las medidas de la habitación donde se va a colocar. Como es evidente, disponer de un salón amplio y espacioso aumenta las posibilidades de elección, tanto en lo que se refiere a la forma como al tamaño del mueble. En cambio, si el salón tiene unas dimensiones reducidas o es más bien estrecho, el sofá no podrá ser muy grande, ya que puede ocasionar sensación de agobio o simplemente obstaculizar el paso.
En el artículo de hoy vamos a hablar de los sofás de fondo reducido, que son sofás con las mismas características y calidad que los sofás habituales, pero que poseen un asiento y unos brazos que sobresalen menos. En concreto, cuando nos referimos a fondo reducido, estamos hablando de una medida de 80 cm frente a los 90-100 cm que tiene un sofá convencional. Esta disminución de diez centímetros se puede decir que no afecta a la comodidad del mueble y, sin embargo, sí se nota, y mucho, en el espacio físico y visual que ocupa en un salón de dimensiones reducidas o con forma alargada.
Los sofás de fondo reducido pertenecen al grupo de sofás modulares, por lo que ofrecen las múltiples posibilidades de combinación que facilita este sistema. Es decir, pueden ser de dos o tres plazas, incorporar un chaisse longue en uno de sus extremos, adoptar forma de L acoplando un módulo rinconera o, si el espacio lo permite, forma de U con dos rinconeras, una de izquierda y otra de derecha, añadir módulos individuales o conjuntarlos con un sillón individual de la misma familia.
En nuestro catálogo, disponemos de tres modelos distintos de sofás de fondo reducido: el sofá Alex, el sofá Topacio y el recientemente incorporado a la gama sofá Boom, todos ellos elaborados en nuestra fábrica de sofás en Zaragoza, con los mismos materiales y mecanismos de confort que el resto de nuestra colección.
El modelo Alex es un sofá modular con respaldo reclinable y asiento deslizante. Presenta un fondo de 80 cm y una altura de 98 cm. El respaldo incorpora riñonera rellena de gomaespuma y los brazos mezclan pluma con cubex. Para facilitar la limpieza, todos los cojines son desenfundables por cremallera. El chaisse longue de la familia mide 155 cm de largo y tiene la opción de convertirse en arcón, por lo que sirve para guardar objetos, como por ejemplo la manta de la siesta, y despejar el salón. Encontrar la combinación que mejor se ajuste a cada salón resulta muy fácil, pues se puede configurar de 20 maneras diferentes.
Fotografía de catálogo de nuestro modelo Alex.
El modelo Topacio es también un sofá de sistema modular, de 80 cm de fondo de asiento deslizante y 98 cm de altura del respaldo, que además de ser reclinable dispone de riñonera con relleno visco opcional, que es el más confortable en la actualidad. Los cojines desenfundables y el chaisse longue convertible en arcón son comodidades que facilitan el mantenimiento o aportan un espacio muy útil, respectivamente. Presenta 20 combinaciones diferentes, por lo que resulta muy fácil adaptarlo a cualquier espacio y encontrar una composición que vaya con cada gusto.
El modelo Boom es el último en sumarse a la familia Tapigrama. Con un fondo de 82 cm y una altura de 105 cm, es el sofá de fondo reducido pensado especialmente para las personas altas. Además incorpora un cabezal reclinable, que mejora el confort y facilita encontrar siempre la postura más saludable para cada miembro de la casa. Asimismo, ofrece la opción de colocarle un motor relax, con lo que se consigue el mayor nivel de comodidad.
En conclusión, los sofás de fondo reducido presentan las mismas características, materiales y comodidad que los sofás modulares convencionales, con la ventaja de que ocupan menos y permiten ganar espacio a la habitación. Además, desde un punto de vista decorativo, quedan igual de bien, ya que ofrece innumerables posibilidades de combinación y disponen de las mismas telas y pieles para elegir la tapicería que más guste.